El vino es uno de los regalos de la tierra que mejor se asientan en la Península Ibérica. Junto con el aceite de oliva, supone uno de los líquidos más apreciados a nivel mundial y su presencia genera multitud de expectativas laborales, empresariales y emprendedoras. Alrededor del vino se ha creado un universo con todo tipo de aplicaciones: desde tabernas especializadas hasta ferias, críticos gastronómicos, innovación e investigación… o uno de los menos conocidos, como es la cristalería.
Cristafiel es una empresa dedicada a grabar, decorar y personalizar cualquier producto relacionado el vino, especialmente el cristal, del que pueden llegar a elaborar artículos exclusivos en este material.
¿Por qué ha triunfado Cristafiel? Por su exclusividad de trabajo. Hay pocas empresas que trabajen tal como lo hace Cristafiel. El modelo de negocio de esta empresa se basa en la especialización concreta en la relación entre cristal y vino. Pero aún así cuenta con un amplio catálogo de productos porque elabora desde copas y decantadores hasta sacacorchos y climatizadores. Y el vino, siempre como un eje que ha proporcionado el éxito a esta empresa.
La originalidad de su negocio y sus más de 20 años de experiencia le ha servido a Cristafiel para entregar artículos a importantes clubs de fútbol, La Casa Real Española y así como una amplia variedad de las bodegas más importantes de España.
Como regalo, como material especializado para profesionales, como un producto más a la merced del líquido burdeos, rosado o blanco que alegra las gargantas desde tiempos inmemoriales. Y un ejemplo de empresa que ha sabido posicionarse como única.