Cataluña. La palabra maldita en este país. ¿O no? La verdad es que es una pena todo lo que está ocurrido en España con la situación política. Una comunidad hermana y que es admirada y adorada por todos, ahora mismo es una de las más conflictivas por culpa de los partidos. Y es que son ellos los que manejan el poder y yo creo que contra la voluntad del pueblo.
Yo era uno de los enamorados de esta comunidad autónoma. Iba siempre a veranear con mis padres, y recuerdo unos veranos mágicos. Con el paso del tiempo dejé de ir, pero llegó un momento en el que tuve que volver por cuestiones de estudio y luego a trabajar. Pues bien, desde esa época han pasado muchas cosas en Cataluña. Hemos pasado por protestas en las calles, por un process, por la aplicación de un 155 y muchas cosas más. De todo esto he aprendido de que la gente es la que vale, y que como en Valencia con la dana, es el pueblo el que salva al pueblo.
Pese a los políticos, creo que Cataluña sigue siendo una buena tierra, acogedora y muy disfrutable. Aunque en este caso, de lo que quiero hablar es más de mi tema, el de las empresas. Y ahora vamos a hacer un análisis de si esta Comunidad es ahora mismo un buen sitio para hacer negocio. Y voy a hacer spoiler, pero Cataluña se presenta actualmente como un entorno favorable para emprender y desarrollar negocios. Y estas son mis razones.
Cuando yo estudié en la Escuela de Formación de Barcelona el grado de Administración y Finanzas, lo primero que nos decían es que el potencia de un territorio se comprueba en su Producto Interior Bruto. Pues bien, en 2024, el Producto Interior Bruto (PIB) de Cataluña creció un 3,6%, superando la media nacional española. Además, las previsiones para 2025 no pueden ser más optimistas. En este caso indican un crecimiento adicional del 2,6%, esto puede crear 175.000 empleos en el próximo año. Y esto es algo muy importante.
Por otro lado, Cataluña ha apostado desde siempre por la reindustrialización y el impulso de sectores estratégicos como la agroalimentación, el diseño de chips europeos y un ecosistema robusto de startups. Y después de unos años de fracaso marcados por la huida de empresas a otras comunidades, ahora vemos que resurge como cual Ave Fénix. La última noticia que tenemos es que La Caixa regresa a su domicilio social en Cataluña.
Infraestructuras
También está demostrado que Barcelona, como capital de Cataluña, ofrece una ubicación estratégica con conexiones globales a través de su aeropuerto internacional, red de trenes de alta velocidad y un puerto comercial de gran envergadura, facilitando el comercio y la logística internacional. Y esto es algo que las empresas tienen que tener en cuenta a la hora de ubicarse en un lado o en otro.
La ciudad de Barcelona, ahora señalamos solo a la capital, cuenta con un ecosistema emprendedor consolidado, respaldado por iniciativas públicas que ofrecen recursos, subvenciones y asesoramiento a nuevos proyectos empresariales. Por lo tanto, podemos estar tranquilos con lo que hacemos. Además, la Generalitat de Cataluña, ahora más tranquila con el mando de Salvador Illa, proporciona diversas ayudas y líneas de financiación destinadas a emprendedores, pymes y autónomos, fomentando la innovación y la internacionalización.
La favorita
Y ya para finalizar vamos con la idea que en mi opinión tiene más peso. Una razonamiento que hay que hacerlo más con el corazón que con los números en la mano. Todos sabemos la situación política que se está viviendo en España en estos momentos. ¿Verdad? El débil Gobierno de Pedro Sánchez depende siempre de los siete votos de los diputados de Junts, los de Carles Puigdemont. Se ha demostrado que este Gobierno es un títere en sus manos. Todo lo que ordenan, rápidamente obedecen. Incluso en algunos temas muy comprometidos.
Por lo tanto, la explicación está claro. Cataluña va a seguir pidiendo y el Gobierno dando, por lo tanto, esta comunidad va a tener una serie de privilegios que otras no. EN lo económico, en lo empresarial, en las infraestructuras, etc. Por lo tanto, la respuesta es clara: Sí. Cataluña es ahora mismo un buen sitio para hacer negocio, y si no que se lo pregunten a Puigdemont. ¿Verdad?