Trabajar desde casa empieza a ser una de las prácticas más habituales en nuestro país. Por eso, no está de más conocer algunos trucos para ambientar un espacio de nuestra vivienda como oficina si estamos pensando en trabajar en casa.
Para organizarnos mejor conviene hacer un presupuesto previo para ayudarte a reducir los costes lo máximo posible. Lo mejor es anotar todo lo que consideremos necesario, principalmente el presupuesto aproximado donde se incluyen los muebles, papelería, decoración y trabajos específicos de reforma.
De hecho, en función de este presupuesto es como mejor podemos valorar si hacer todo el proyecto sin interrupción o, por el contrario, hacerlo por etapas.
Una vez hecho el presupuesto, debemos de evaluar si estamos bien ubicados para trabajar. Según los expertos es importante que el lugar que elijamos sea adecuado para trabajar, que n haya ruidos o interrupciones, esto repercute directamente con la productividad.
Funcional y Práctico. Las Claves de nuestro Espacio de Trabajo
Debemos procurar que el espacio tenga buena iluminación natural, así como ventilación. En este sentido, podemos instalar cortinas translúcidas que filtren bien la luz, las mejores telas son el lino, la gasa, la seda o el nailon y de colores claros, principalmente blancos, beiges o tonalidades pastes como rosa o azul claro.
Por otra parte, de poco sirve que decoremos bien el espacio si no hemos hecho las reparaciones más básicas. Depende del tipo de vivienda, pero si se trata de una vivienda antigua, una de las principales cosas que debemos de revisar es la cubierta.
Esta fue una de las cosas por las que empecé mi reforma, además es importante tener esto en cuenta para establecer nuestro presupuesto inicial.
Por suerte, un amigo me habló de Cubiertas Estévez con una amplia experiencia en construcción y reforma de cubiertas y tejados en mal estado de edificios de particulares o empresas. Además, de tener una buena relación calidad-precio, y de esforzarse al máximo en las tareas de construcción y en la reforma de cubiertas en Madrid, adaptando cada proyecto a las necesidades de sus clientes.
También me dieron buenos consejos dese su amplia experiencia para ayudarme a dar con la fórmula perfecta a la hora de crear mi espacio de trabajo. Me recordaron lo importante que es, para ello, alejarse del ruido y de los lugares transitados y situarnos, a poder ser, lo más lejos posible de la sala de estar y de la cocina, ya que estos suelen ser los lugares más transitados de la casa.
Otro elemento que, en ocasiones olvidamos, es el del orden y la limpieza. A veces, no pensamos en esto cuando nos planteamos comprar una casa de gran tamaño. Y es que sí, muy bonita, pero también da mucho trabajo.
En el caso de nuestro lugar de trabajo ocurre lo mismo, lo interesante es crear un lugar funcional, que sea fácil de mantener ordenado para que todo el tiempo lo podamos dedicar a lo que tenemos que hacer realmente.
Por ello, en este sentido, tratar de minimizar la decoración es una clave. En la simplicidad está el gusto y, al parecer, también la productividad.
Otra idea para ayudarnos a tener las cosas más organizadas puede ser añadir un gabinete de archivo, mi hermana que es secretaria es lo primero que siempre me recuerda que no puede faltarme en mi oficina.